Jennifer Lopez y su novio Alex Rodriguez salieron a la calle prácticamente uniformados. Y es que los dos traían puestos pantalones holgados, sneakers y sus clásicas gafas oscuras.
Los paparazzi captaron a la parejita en Los Ángeles, mientras recorrían varias posibles oficinas para rentar. En particular, llamó la atención el look de JLo, con un bodysuit negro que enmarcaba a la perfección su pequeña cintura.
Además, la mamá de mellizos traía puestos unos boyfriend jeans y calzado deportivo color blanco.
Jennifer recogió su cabello en una ponytail y como accesorios usó unos aros metálicos grandes. Su body tenía un sexy escote e incluso parecía que debajo de él la estrella no traía sostén.